El pasado 20 de febrero la Asociación Andaluza de Hemofilia celebró en Granada la segunda ESCUELA DE PADRES con la colaboración de la Consejería de Salud (actuaciones de ayuda mutua y autocuidados 2015-2016).
Este programa ofrece a padres y madres de hijos afectados de hemofilia o cualquier otra coagulopatía congénita formación teórico-práctica que les ayude a vivir con la máxima independencia y autonomía, aprendiendo o mejorando el autotratamiento, y conociendo todos los aspectos claves de la vida diaria y la forma de afrontar de forma responsable las situaciones y complicaciones que se puedan presentar de forma imprevista. Siempre que se den las circunstancias que así lo permitan, son invitados a asistir otros familiares directos del colectivo diana al que se destina la actividad, aprovechando así los recursos que tenemos para ampliar el conocimiento de la enfermedad en el entorno más cercano.
La Escuela comenzó con la intervención del Dr. Liras, Profesor de Fisiología de la UCM y colaborador científico de Asanhemo, realizando una breve exposición de lo que es la hemofilia y otras coagulopatías congénitas, deteniéndose más exhaustivamente en la herencia de la misma con ejemplos práctico y visuales. A continuación, Dña. María Dolores Castillo González, Psicóloga que trabaja dentro de la Asociación de Padres de Niños con Cáncer de Jaén (ALES), realizó el abordaje que desde su campo se lleva a cabo para tratar una patología crónica tanto para la persona afectada como para el seno familiar, así como los mecanismos que podemos utilizar para afrontar y aceptar cada situación que se pueda presentar.
La última parte de la Escuela se dedicó a la utilidad de la fisioterapia en la recuperación de los sangrados articulares y en el mantenimiento muscular, en hemofilia. Intervino D. Romualdo Castillo, Profesor del Grado de Fisioterapia en la Escuela Universitaria Francisco Maldonado de Osuna, y enfocó su intervención a lo que debería ser la fisioterapia en cualquier enfermedad musculo esquelética crónica incluyendo claro está a la hemofilia, insistiendo en que cada paciente debe ser valorado de forma individual y adecuando cada programa específico de rehabilitación a cada persona.